Nanoingenieros de la Universidad de California en San Diego (EEUU) han diseñado micromotores que rastrean rápidamente el agua, eliminan el dióxido de carbono presente en ella, y lo convierten en un material sólido utilizable. El estudio de prueba de concepto ha señalado que este sistema podría mitigar la acumulación de CO2 en el mar.

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Un comunicado de la UC San Diego explica que los micromotores consisten en unos tubos de seis micrómetros de largo que ayudan a convertir rápidamente el dióxido de carbono en carbonato de calcio, un mineral sólido que se encuentra en las cáscaras de huevo, las conchas de diversos organismos marinos, los suplementos de calcio y el cemento.

La superficie externa de los micromotores está constituida por un polímero que contiene la enzima anhidrasa carbónica, que acelera la reacción entre el dióxido de carbono y el agua para formar bicarbonato. El cloruro de calcio, que se añade a las soluciones de agua, ayuda a convertir dicho bicarbonato en carbonato de calcio.

El movimiento rápido y continuo de los micromotores en la solución hace que estos sean extremadamente eficientes en la eliminación de dióxido de carbono del agua, explican los investigadores.

Por otra parte, su movimiento autónomo propicia una mezcla eficiente en la solución, lo que lleva a la conversión más rápida del dióxido de carbono.

Para proporcionar energía a los micromotores en el agua, los investigadores les añadieron un compuesto químico llamado peróxido de hidrógeno, que reacciona con la superficie de platino del interior de los micromotores para generar una corriente de burbujas de oxígeno, que impulsa a estas pequeñas máquinas.

Este uso resulta un inconveniente, pues este es un aditivo extra que requiere del uso de platino, un material caro, en la fabricación de las máquinas. Por eso, como siguiente paso, los investigadores están planeando hacer micromotores que puedan ser propulsados por agua.

Si los micromotores pudieran utilizar el entorno como combustible, su fabricación sería más escalable, más ecológica y menos costosa, señalan.

Fuente: iies.