¿Qué puede haber mejor que empezar el lunes por la mañana con buenas noticias?
Familia de acogida en Valladolid. Fuente: ONG Ven Con Nosotros.
En estas fechas muchas familias comienzan sus vacaciones, algunas afortunadas pueden irse de veraneo, viajar o disfrutar en sitios paradisiacos, otras, eligen además invertir su tiempo de vacaciones en ayudar a los que más lo necesitan. Es el caso de las llamadas «Familias de Acogida», gente como tú y como yo que deciden abrir las puertas de sus casas para acoger temporalmente a niños extranjeros procedentes de zonas castigadas como los campos de refugiados saharauis en Tindouf (Argelia) o de Ucrania y Bielorrusia, afectados por la explosión del reactor nuclear de Chernóbil; de orfanatos rusos, y de países africanos con crisis humanitarias frecuentes, como Etiopía. Me parece muy positivo que haya familias que decidan ayudar a niños de esta forma, a pesar de estar pasando por momentos económicos difícil.
La ONG Ven Con Nosotros explica en su Web los beneficios que tienen estos niños al pasar una temporada aquí:
Desde el punto de vista físico, pueden recibir una alimentación buena y no contaminada, con lo que, en un solo verano, pueden recuperar una parte de su retraso en el desarrollo, y reducir su nivel de radiactividad entre el 30 y el 40% -según datos del instituto independiente de seguridad radiológica BELRAD- y resolver otros problemas médicos: tratamiento de dermatitis, arreglos dentales, etc…
Desde el punto de vista psicológico pueden divertirse y pasárselo bien, aprender que el mundo puede ser un lugar acogedor en el que hay personas buenas que les quieren, y que les demuestran que ellos son importantes, valiosos y dignos de ser queridos.
Pero además, el cariño, la ayuda y el contacto podrán seguir durante el invierno en forma de llamadas, cartas o paquetes y de la posibilidad de volver el próximo verano. Una niña comentaba: «ahora soy la primera para alguien».
En las últimas semanas se han producido varios descubrimientos, como el hallazgo de un fósil de hueso grabado de 13 mil años de antigüedad. Se ha descubierto en Estados Unidos por invesetigadores del Museo Smithsonian de Historia Natural y de la Universidad de Florida y el grabado representa la figura es de un mastodonte, un mamut. Se trata de la evidencia de que quienes habitaron América en la última Edad del Hielo eran cazadores.
Desde hace diez años para acá, se han descubierto más de 1.000 nuevas especies en Guinea Ecuatorial, como una rana con colmillos, una serpiente ciega y un delfín de nariz chata. Las nuevas especies se dieron a conocer el pasado 27 de junio en un estudio presentado por el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). Ente los descubrimientos realizados por los hay algunas decenas de mariposas e invertebrados, al ritmo de dos por semana entre 1998 y 2008, ha precisado WWF en la presentación de un informe sobre la biodiversidad de esta isla dividida entre Indonesia y Papúa-Nueva-Guinea.
También en los últimos días ha habido un invento presentado que me parece especialmente interesante, se trata de convertir las pulsaciones de los teclados de dispositivos portátiles en energía mediante la piezoelectricidad, lo que permitiría crear aparatos portátiles auto-recargables. La piezoelectricidad es una cualidad de algunos materiales que adquieren una carga eléctrica cuando son sometidos a tensiones mecánicas. Su aplicación más extendida hasta la fecha son los relojes de cuarzo. Ahora, Investigadores australianos del Royal Melbourne Institute of Technology (RMIT) quieren aprovecharla para producir energía. Los investigadores han realizado un estudio en el que han medido la cantidad de energía que puede generar una película piezoeléctrica, porque, según la coautora del estudio, la doctora Madhu Bhaskaran, «tienen la única posibilidad práctica de integrar la piezoelectricidad en la tecnología eléctrica existente». Por supuesto, esto se podría aplicar a cualquier gadget que necesite autonomía y tenga teclas, como un ordenador portátil o un teléfono móvil. Claro que ahora muchos móviles son táctiles y eso les aleja de este proyecto; pero también se conectan cada vez más con otros dispositivos y eso amplía las posibilidades. «La energía de los piezoeléctricos podría ser integrada en zapatillas de correr para cargar teléfonos móviles, permitir que los portátiles se alimenten a través del tecleo o incluso ser usada para convertir la presión sanguínea en fuente de energía para marcapasos», ha explicado la investigadora.
Otro de los inventos presentados en los últimos días es un dispositivo que ayuda a los invidentes a moverse con autonomía, algo así como «ver con los oídos». El sistema ha sido desarrollado por investigadores de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y consiste en unas gafas con dos microcámaras y unos auriculares que crean una imagen acústica del espacio. El sistema hace un reconocimiento de formas y las sustituye por sonidos posicionados sobre la superficie de esas formas reconocidas, y las microcámaras analizan el espacio, crean un modelo tridimensional y hacen que suenen puntos de sonido. De esta forma, el invidente «oye el espacio» y su cerebro reconstruye la forma a partir de los sonidos espacializados.
Y para este veranito si tienes niños este otro invento seguro que será bien recibido, se trata del Puddle Jumper, un nuevo flotador para niños que también está homologado en este país como chaleco salvavidas y que permite a los niños poder disfrutar de un baño con total seguridad. Se trata de un flotador de tres piezas que no necesitan hincharse: una central para el pecho y una para cada uno de los brazos (tipo manguitos), que se abrochan en la espalda, con un cierre seguro, que impide que los niños puedan quitárselo. Una de las novedades es que está fabricado en PVC libre de cualquier componente tóxico, con la flotabilidad asegurada y sin riesgo para que se pinchen o los niños se lo quiten gracias a su cierre de seguridad:
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