El donostiarra Jaime Caballero nadó los 40 Km «a pelo»
Nado porque puedo y para los que no pueden
Recientemente conocí la historia de Jaime Caballero nadador de travesías donostiarra que recientemente cruzó el Lago Nesss a nado, del tirón y sin traje de neopreno «a pelo».
La proeza la completó el pasado 18 de agosto, día en el que cruzó los 40 KM después de 12 largas horas, que comenzaron poco antes de las 8.40 -hora local-.
Y no es la primera, a sus espaldas lleva ya la la vuelta a Manhattan, la travesía Bilbao-San Sebastián, cruzar el Estrecho de Gibraltar (ida y vuelta) o cruzar el Canal de la Mancha.
Pero lo que más me llama la atención de este auténtico héroe es su motivación para seguir nadando: lo hace por una causa solidaria, para colaborar luchar contra la ELA, la Esclerosis Lateral Amiotrófica:
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=-jHAhHEyDQw[/youtube]
http://www.youtube.com/watch?v=-jHAhHEyDQw
Según se relata en Marca, en la parte central del camino las condiciones empeoraron y se volvieron más duras: la temperatura del agua bajo un par de grados y viento de frente originó un fuerte oleaje que dificultaba el nado. Una vez pasado ese tramo, pero el esfuerzo continuo se empezó a notar en la cara de Jaime, que ya no intentaba ocultar su sufrimiento y exigía cada pocos metros información sobre dónde estaba y cuánto le quedaba.
Finalmente consiguió terminar la proeza ayudado por la motivación que le llevaba a nadar, según cuenta en el reportaje de ABC:
«Lo pasé muy mal, sobre todo en los últimos 500 metros. Pensé que mi equipo me engañaba desde el barco de apoyo. Me paraba cada dos metros, me quitaba las gafas, me cabreaba. Entonces me acordé —como durante todo el recorrido— de mi tío José Mari, que murió de ELA (esclerosis lateral amiotrófica) y de otras víctimas de esta terrible enfermedad. Mi sufrimiento era opcional, no como el de ellos. Estaba aquí para lograr una hazaña deportiva, sí, pero sobre todo para dar más visibilidad a la Asociación Siempre Adelante, que ayuda a la investigación y cuidados paliativos de la ELA. Cuando terminé, al borde de la hipotermia, me sentía tan emocionado que quería llorar… y no podía. Estaba seco».
Jaime se convirtió así en el primer español y undécimo en el mundo que consigue tal hazaña sin ningún tipo de ayuda y sin traje de neopreno: sólo con dos barcos de apoyo en el que viajaban los capitanes, la jueza, sus colaboradores y Michael Read, el Rey del Canal, un antiguo nadador que también cumplió esa gesta y que le quiso acompañar.
Y aunque parezca una proeza sobrehumana, el cruza a nado el Lago Ness es algo para lo que Jaime se ha preparado a conciencia, fiel a su filosofía:
«Creo que es importante marcarse objetivos a corto plazo para poder llegar a una meta mucho más amplia. Y no sólo en el deporte, sino en todos los ámbitos de la vida.»
Jaime explica en su blog que traza sus objetivos de menos a más: nada, entrena, realiza retos y ayuda a los demás. Empezó participando en travesías populares y poco a poco se dio cuenta de que el deporte le aportaba mucho más de lo que pensaba. Poco a poco sus objetivos eran más ambiciosos y su determinación por superarlos crecía también con el tiempo.
“Nado porque puedo”
Cuando a Jaime Caballero le preguntan ¿por qué nadas? su respuesta es esta: «Nado porque puedo, me parece una forma muy intuitiva de expresar que los que podemos tenemos que actuar. Cada uno en su ámbito y por una causa concreta. En mi caso el ámbito es la natación y la causa es hacer algo por los demás. Precisamente porque puedo.»
Jaime lleva nadando desde que era pequeño, dejó de hacerlo cuando tuvo 14-15 años, y lo retomó 10 años después. Como muchas otras personas cuando se alcanzan la adolescencia no practicó ningún deporte de manera regular y comenzó a fumar, pero cuando cumplió los 24 años, dejó de fumar y pensó que era buen momento para retomar el deporte, en concreto la natación.
Sostiene que cada travesía ha sido muy diferente del resto, pero en todas ellas ha habido un componente común: “momentos de flaqueza”. La retirada se ha paseado por su cabeza en todas ellas por motivos muy diferentes, pero el dolor es inevitable y el sufrimiento es opcional.
Depende de la actitud de cada uno de cómo reaccionemos al dolor, a la fatiga o a una mala noticia. Y esto también se entrena.
«SIEMPRE ADELANTE»
La transformación que vivió Jaime y que le llevó a cambiar el fin por el que nada la explica en la Web de la Asociación Siempre Adelante, que él mismo preside:
Hace tiempo que nado travesías y de una forma u otra, con diferentes sponsors, he ido cubriendo los costes de las mismas. Fue en 2009 tras mi travesía Bilbao-San Sebastián cuando coincidió qu eme encotnré con un excedente económico de mis sponsors y al mismo tiempo acababa de perder a un familiar muy querido que murió de Esclerosis Lateral Amiotrófica. Fue en ese momento en que decidí que podría y debía ayudara otros más desfavorecidos como mi tío, que había usfrido la enfermedad más cruel del mundo (ELA). Así empecé a colaborar con una Asociación Local que se dedica a adar apoyo y cuidados de enfermos de ELA y a sus familias…
Tenemos que luchar ante las adversidades con fuerza y pensar que hay que mirar siempre adelante.
Más información en: http://www.jaimecaballero.es.
