Joven mexicana de 13 años ya es licenciada en psicología
A Dafne Almazán Anaya, como cualquier otra chica de su edad, le gusta ir al cine con amigas, cocinar tartas y asistir a clases de piano. Sin embargo, hay algo que la distingue muy particularmente: con tan sólo trece años, Dafne acaba de licenciarse como psicóloga, convirtiéndose en la licenciada en psicología más joven del mundo. Todo ello gracias a un novedoso plan de estudios que aprovecha su condición de superdotada sin causarle ningún trauma.
A pesar de ser una niña superdotada, insiste en que lleva una vida normal. «Soy una niña normal, tengo amigas fuera de la escuela, van a mi casa y hacemos cosas, pero también tengo mis amigas en la escuela. Vamos al cine, al centro comercial y me tratan bien, como una niña normal», comenta la joven, que ha retomado sus clases de piano, es cinturón amarillo de taekwondo y perfecciona su inglés al tiempo que aprende chino y francés.
Además, asegura que siempre les insiste a sus amigas «que todas las personas tienen algún tipo de talento y que algún día, si no lo han encontrado, lo van a encontrar».
Dafne Almazán Anaya posa esta semana en Ciudad de México. (EFE) / Por 20minutos.
Dafne es la menor de tres hermanos, después de Delany y Andrew, que también fueron psicólogos a los 17 y 16 años respectivamente. Su padre, Asdrúbal Almazán, médico cirujano, aclara que Dafne no estuvo en un sistema de educación regular. «Detectamos a los dos años y medio que ella aprendió, de manera autodidacta, a leer y escribir, y entonces empezamos un trabajo de potenciación intelectual que Andrew, su hermano, ha fundamentado», comentó el padre.
Andrew, que ahora tiene 20 años, dirige desde hace varios años las investigaciones científicas del Centro de Atención al Talento (Cedat), que fundaron sus padres, Asdrúbal Almazán y Dunia Anaya, en vista de que el joven, al que le diagnosticaron trastorno por déficit de atención, no recibía el trato adecuado a sus sobrados conocimientos en el sistema tradicional.
La adolescente respondió favorablemente al sistema creado por su padre y su hermano, quienes creen que el caso de Dafne es excepcional. «Es de los primeros casos en el mundo que dan resultados; otros países han intentado tener niños graduados a nivel universitario, pero no lo lograron. A Dafne le cuidamos la parte emocional al cien por cien con los niños de su edad, y no se le insertó en una universidad directamente a convivir con adultos», explicó su padre.
Tras los estudios en educación que cursará en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Dafne tiene la mira puesta en un doctorado. «Y, dependiendo de mi edad, otra carrera, porque todavía me falta mucho por aprender», señaló.
A pesar de esta increíble historia, la normalidad en la vida de Dafne queda patente cuando responde si festejará su decimoquinto cumpleaños, motivo de grandes festejos entre las jóvenes mexicanas, y el regalo que le gustaría recibir: «Sí, el próximo año en octubre cumplo 15 y estoy muy emocionada; yo decidiría un viaje, pero aún no pienso a dónde», afirma la pequeña gran genio.
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