Desarrollan un invernadero inteligente para zonas áridas.

La organización Roots Up ha desarrollado un invernadero inteligente en el que es posible cultivar y, además, recolectar agua potable en las zonas más áridas del mundo. El organismo trabaja desde la Universidad de Gondar, en Etiopía, a través de talleres que tratan de fomentar que los estudiantes sean los agentes del cambio en el país.

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El objetivo que persigue Roots Up es ofrecer las herramientas necesarias para desarrollar la agricultura, aunque se trate de zonas muy áridas. 

Este innovador invernadero, que permite cultivar en el desierto aprovechando la escasa agua que proviene de la humedad del aire, utiliza materiales locales, lo que lo hace aún más asequible.

Por su facilidad y su disponibilidad, este invento podría suponer un alivio ante la imposibilidad de producir alimentos en grandes áreas de Etiopía en las que no precipita hasta durante seis meses seguidos.

Además, el agua recolectada por este invernadero no sólo podría utilizarse para los cultivos, sino también para el consumo humano.

-Vídeo: Invernadero que recolecta agua-

“Los habitantes de Etiopía tienen un acceso muy limitado al agua potable a lo largo del año. (…) Tienen que recorrer un largo camino hasta el río, que está prácticamente seco durante la estación seca, y este agua tiene un nivel muy alto de turbidez. El recolector de rocío del invernadero tiene varios propósitos. En primer lugar, permitirá a los agricultores recolectar la cantidad apropiada de agua potable diaria necesaria para su propio consumo básico. Satisfecha esta necesidad, los agricultores podrán regar sus cultivos”. Mathilde Richelet, cofundadora de Roots Up.

Este inteligente invernadero funciona de una manera muy simple: el calor del día provoca que el agua del interior se evapore, generando una alta humedad. Este “efecto invernadero” permite el excelente crecimiento de las plantas en el interior.

Durante la noche, la temperatura cae y el techo del invernadero debe ser abierto. Entonces, el agua alcanza su punto de condensación y se forman pequeñas gotitas sobre la lámina de plástico. Este agua, después de ser recolectada en un tanque, podrá ser reutilizada para riego o para consumo.

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Sin duda alguna, estas son las pequeñas ideas que pueden generar grandes cambios; las que de manera sostenible y a partir de materiales locales, solucionan un problema tan grave como la falta de alimento y de agua potable en las zonas más áridas del mundo.

Fuente:

Upsocl