Investigadores desarrollan hormigón hecho con CO2 de las centrales eléctricas.
Un grupo de investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) ha desarrollado un sistema que permite aprovechar el CO2 contaminante que emiten las centrales eléctricas para fabricar hormigón.
El sistema, que por el momento sólo ha sido testado en laboratorio, podría funcionar a gran escala y convertirse en una solución ecológica globalmente aplicable.
Los investigadores trabajan en un proceso de ciclo cerrado que incluye la captura del CO2 que emiten las plantas de energía, para producir con él un nuevo material de construcción llamado CO2ncrete (hormigón de CO2). El material, que tiene forma de pequeños cilindros, se imprime mediante impresoras 3D.
El equipo de expertos espera poder aumentar el volumen de producción para poder explotar el CO2ncrete a escala comercial.
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