• Investigadores de la UCA han desarrollado un novedoso transistor electrónico, utilizando el diamante como material semiconductor.
  • Con este invento se consigue una mayor eficiencia y versatilidad.

Un grupo de científicos ha creado un nuevo transistor electrónico, fabricado con diamantes. La razón de ser de esta elección se encuentra en que este tipo de material semiconductor es más eficiente. Además, el invento posee una estructura novedosa. Tras su descubrimiento, se encuentra un equipo del departamento de Ciencias de los Materiales e Ingeniería Metalúrgica de la Universidad de Cádiz, capitaneado por el catedrático Daniel Araujo Gay.

La utilidad de un transistor es la de amplificar o conmutar señales electrónicas. Igualmente, este tipo de recursos suele ser empleado en la industria, tanto en los circuitos analógicos como en los digitales. De este modo, podemos encontrarlos en dispositivos tecnológicos cotidianos, como móviles, ordenadores o electrodomésticos. 

Una de las singularidades de este nuevo transistor es que es de efecto de campo metal-óxido semiconductor (MOSFET, por sus siglas en inglés). Así, sus impulsores han conseguido mejorar las características habituales de este tipo de artilugios gracias al uso de una original estructura tridimensional y a la integración del diamante como material base del MOSFET. Además, otra peculiardad de este invento es su forma de fabricación.

Por qué usar el diamante en un transistor electrónico

Con el uso del diamante, los investigadores han alcanzado una mayor eficiencia del dispositivo. No obstante, los futuros transformadores de potencia eléctrica podrían reducir hasta un 90% de su peso y pérdidas energéticas.

A su vez, este nuevo transistor posee una mayor versatilidad de cara a aplicarse en nuevas estructuras. Lo cuál le convierte en un producto valioso para el sector industrial electrónico, así como para el energético. Es más, las excelentes propiedades eléctricas y térmicas del diamante hacen que su uso como material semiconductor sea de gran interés. igualmente, el invento cuenta con una serie de capas que evita la generación interna de altos campos eléctricos o posibles cortocircuitos.

La utilidad de este invento cobra aún más sentido en el contexto en el que nos encontramos. Y es que las nuevas aplicaciones en el transporte como trenes de alta velocidad, coches eléctricos, aviones eléctricos o híbridos o la necesidad de transformar electricidad desde centrales eléctricas basadas en fuentes de energías renovables (centrales eólicas, fotovoltaicas,…), hace especialmente necesario el desarrollo de transformadores eléctricos con mayor eficacia.

Por este motivo, es necesario el uso de nuevos materiales como el diamante o el carburo de silicio (SiC). En este sentido, “el diamante sintético se ha situado como una opción viable y eficiente que expande los límites de las tecnologías de silicio y del SiC; abriendo el camino a nuevas formas de trabajo dentro de la industria”, cono señalan desde la UCA.

Fuente: Fundación Descubre

CAB/AR