El programa de educación digital Profuturo ha premiado a las startups TOMi y Moon, por llevar electricidad e Internet a escuelas apartadas. Concretamente, estos proyectos innovadores apuestan por soluciones de inclusión energética y digital. De este modo, consiguen que los alumnos que estudian en escuelas ubicadas en zonas remotas puedan acceder a recursos educativos digitales.

ProFuturo es una iniciativa impulsada por Fundación Telefónica, Fundación ¨la Caixa¨, y Wayra, el hub de innovación abierta de Telefónica. Entre sus principales objetivos, se encuentra el de reducir la brecha educativa en el mundo. Para ello, lleva la educación digital de calidad a niños y niñas que viven en entornos vulnerables de Latinoamérica, el Caribe, África y Asia, y en ocasiones implementa su programa en escuelas que no tienen acceso a la red eléctrica ni a Internet. Para mejorar la respuesta que da en estas situaciones, buscará vías de colaboración con TOMi y Moon.

Según un informe publicado el pasado septiembre por Unesco, Unicef y la Unión Internacional de Telecomunicaciones (ITU), un 46,4 por ciento de la población mundial no tiene conexión a Internet. En paralelo, 789 millones de personas en el mundo aún viven sin electricidad de acuerdo a los últimos datos del Banco Mundial.

Startups que apuestan por la digitalización de las escuelas

La startup francesa Moon propone una solución para poblaciones de bajos recursos y sin conexión a la red eléctrica. Para ello recurre a un kit solar fotovoltáico y un teléfono móvil inteligente. El dispositivo móvil tiene instaladas una selección de aplicaciones de bajo consumo de datos, que además pueden utilizarse ‘offline’. Estas dan acceso a servicios digitales, entre ellos a recursos educativos de la Khan Academy o la biblioteca virtual YouScribe.

El kit incluye un panel solar, que se conecta a una batería con la que se puede cargar el teléfono y 3 lámparas LED. El proyecto, que se implementa en el sur de Senegal, buscar contribuir a la inclusión energética, digital y financiera de un millón de africanos en 2023.

Por su parte, TOMi ha desarrollado una plataforma digital que permite a los docentes crear clases interactivas virtuales. Con este fin, se ha diseñado un banco abierto de recursos educativos, que utilizarán los maestros para realizar actividades y contenidos. Además, les permitirá impartir las clases a sus alumnos en las escuelas, aunque estas no tengan Internet.

Para ello, esta startup ha creado un dispositivo electrónico inalámbrico que permite simular una red wifi en el aula a la que los alumnos sincronizan sus ordenadores, tablets o teléfonos. En este entorno virtual los estudiantes pueden interactuar entre ellos y competir en la resolución de ejercicios que les plantea el docente de forma divertida a través de sopas de letras, preguntas de selección múltiple o actividades de asociar conceptos.

El dispositivo también permite acceder a los contenidos de la plataforma proyectándolos sobre una pizarra o pared ya que tiene un sensor que convierte cualquier superficie en una pantalla táctil. De esta manera, los estudiantes que no tienen ordenador, tablet o smartphone pueden participar igualmente en las clases. La solución digital de TOMi se usa ya en 200 ciudades de 10 países de Latinoamérica.

Fuente: Agencia Servimedia

CAB/AR