Hoy se presentó el marco estratégico de energía y clima; el anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética y Estrategia de Transición Justa, llegó al Consejo de Ministros este viernes.

La organización ecologista, Greenpeace, exige que se aumente su ambición para ser coherente con la ciencia climática. Además, pide que el proceso electoral no paralice la tramitación de este paquete y espera que la participación pública a la que se tiene que someter el Plan consiga reforzarlo para acelerar la transición energética.

El paquete de energía y clima es una urgencia histórica por encima de cualquier batalla políticaQue España se proponga alcanzar un sistema eléctrico 100% renovable es un triunfo de quienes en un principio demostramos que esto es posible y necesario, aunque necesitamos que se haga extensible a toda la energía, no solo la electricidad”, declaró Mario Rodríguez, director ejecutivo de Greenpeace España.

Greenpeace considera este conjunto de medidas como imprescindibles para que España se reenganche a la lucha mundial contra el cambio climático y aproveche sus oportunidades.

 

Greenpeace pide más ambición en el plan de energía y clima que se presentó el viernes 22 en el Congreso

 

Estas medidas apuntan en la dirección correcta, ya que a pesar de ser mejorables, responden a una política que deja de resistirse al necesario cambio para salvar el clima y pasa de la negación climática a la acción, en especial en la intención de crear un marco de certidumbre y estabilidad regulatoria para favorecer la transición energética.

Ahora hace falta ajustar mejor esa acción a lo que marcan tanto la ciencia como un reparto global justo de las responsabilidades.

Respecto al nivel de ambición climática necesario para hacer frente al cambio climático, la UE debe garantizar que cumple con sus compromisos suscritos en el Acuerdo de París.

 

La organización pide a la ministra de Transición Ecológica para principios de marzo que impulse que la Unión Europea acuerde la descarbonización completa para 2040

 

Por este motivo, el Gobierno español tiene que defender posiciones que garanticen no superar el grado y medio; esta es la única forma de asegurar estabilidad y certidumbre en los procesos de transición energética nacionales.

Por esto, dado que los días 4 y 5 de marzo, respectivamente, se reunirán el Consejo de Ministros de Transporte, Telecomunicaciones y Energía y el de Medio Ambiente en Bruselas para debatir la visión estratégica a largo plazo propuesta por la Comisión para una economía climáticamente neutra y un planeta limpio para todos.

Greenpeace pide a la ministra de Transición Ecológica que impulse que la Unión Europea acuerde la descarbonización completa para 2040 y aumentar urgentemente sus objetivos de reducción de emisiones hasta al menos el 65% para 2030.