Un abrazo inolvidable.
El explorador Richard Wiese, autor de la libro «Born to Explore: How to Be a Backyard Adventurer» viajó durante el rodaje de un episodio de la serie que lleva como nombre el mismo título del libro (Nacido para Explorar) a Dorset, Inglaterra para visitar la colonia de cisnes de Abbotsbury Swannery.
Una vez allí, Wiese colaboró en la cura y rehabilitación de las aves, pero hubo una en particular que entabló una especial amistad con él: se trataba de una hembra de cisne que había resultado herida tras haber quedado atrapado en una alambrada metálica.
En aquél entonces, Richard se acercó al animal y trató de hacer que se sintiera cómodo antes de transportarlo al santuario para su recuperación.
Años después, la cisne y su rescatador se reencontraron de nuevo, y el animal parecía no haber olvidado lo que esta persona hizo por él. Wiese confesó a ABC news: «Cuando lo puse a mi lado pude sentir sus latidos del corazón; relajó su cuello y lo enrolló alrededor del mío. Es un momento maravilloso cuando un animal confía totalmente en ti».
Llama especialmente la atención la actitud tan cariñosa del ave con su rescatador, más aún teniendo en cuenta que los cisnes son criaturas territoriales defienden sus nidos y su terreno a toda costa su, ya sea de otros animales o de los seres humanos. Wiese recuerda al respecto que «aunque los cisnes son animales preciosos, pueden ser muy feroces con las personas».
Sin embargo, este cisne en particular no retrocedió ni mostró miedo cuando Wiese lo cogió. En su lugar, el cisne se sitió totalmente seguro en los brazos de su salvador, proporcionando al explorador un abrazo inolvidable.
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Rosa Mary de Torres de Las Palmas – http://www.somosuno.es.
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