La humanidad más cerca de convertirse en una «especie interplanetaria».
El visionario Elon Musk, ha presentado esta semana en una conferencia los detalles de cómo será el primer viaje tripulado a Marte y de las arquitecturas necesarias que harán posible el sostenimiento de los seres humanos en el planeta rojo.
El l multimillonario cree que el ser humano está cada vez más cerca de convertirse en una «especie multiplanetaria» y para que su visión se haga realidad, espera recibir el apoyo de la industria, el gobierno americano y la comunidad científica en en los años venideros.
Marte, el planeta elegido.
Marte es el planeta elegido para ser el primero a colonizar por la humanidad debido a su cercanía, composición, similaridades a la Tierra, potenciales recursos para establecer una colonia con los debidos ajustes artificiales y la inmediata necesidad de tener un «plan B» que permita a la humanidad huir de nuestro planeta ante desastres naturales irreversibles.
La empresa espacial SpaceX que, comandada Elon Musk, ya tiene más que avanzados los prototipos, detalles y fechas para hacer realidad la misión a Marte en menos de dos décadas, siendo la primera parte de lo pretendido el conseguir vehículos reutilizables así como viajes asequibles.
Esquema y costes generales de la misión.
Se estima que un viaje a Marte pueda costar unos 10.000 millones de dólares por persona, pero SpaceX afirma que podrá equipararlo al precio de mantener una vivienda promedio en territorio norteamericano.
La clave para reducir los costes es el uso de equipos y recursos totalmente reutilizables además de recargables en órbita y que se puedan generar electricidad en la superficie de Marte o con ayuda del sol, lo que permitiría reducir el coste por misión dejándolo en unos 62 millones de dólares (11 millones por el cohete, 8 millones por el viaje de recarga y 43 por la nave) con un costo por tonelada inferior a los 140.000 dólares.
La idea de SpaceX es poner en práctica todo lo que han desarrollado en cuanto a cohetes reutilizables para enviar las primeras naves, trayendo de vuelta y de forma controlada los cohetes y tanques tan pronto se logre sacar las naves al espacio en un proceso de dos fases (primero se pone a la nave en órbita y luego se le envía un equipo para llenar su tanque de combustible), siendo posible utilizar dicho sistema de impulso y recarga inmediatamente con otras naves.
Cada cohete o «booster» soportaría hasta 1.000 usos, cada «tanker» o tanque de recarga 100 usos y cada nave 12 usos incluyendo trayectos de ida y vuelta.
La nave y su cohete.
La combinación cohete/tanque desarrollada por SpaceX se denomina Sistema de Transporte Interplanetario. Dicho vehículo marciano gozaría de una estructura en fibra de carbono, propulsión por CH4/02, presurización autógena, casi el doble de altura de un Falcon 9 -otro cohete que ha usado SpaceX en las pruebas de reutilización- y capacidad de carga 24 veces superior.
Los monstruos encargados de la generación y carga de combustible serían los «Raptor Engine» mientras que el cohete contaría con unas 28.000.000 libras de empuje en el despegue -500.000 por cada raptor engine -.
Por su parte, la nave, con unos 17 metros de diámetro y 49.5 de longitud además de un diseño inspirado en las naves SpaceX Dragon, buscaría llevar hasta 100 pasajeros por viaje y podría soportar hasta más de 1.650 grados Celsius los cuales enfrentaría al entrar a las atmósferas de ambos planetas. Lo demás tendría que ver con la planta de generación de químico propulsor montada desde el primer viaje a Marte.
SpaceX espera comenzar sus exploraciones en 2018 y los primeros viajes con humanos a partir del año 2023.
Jupiter, Encélado (luna de Saturno), Europa (luna de Jupiter) y Saturno, serían los siguientes planetas de la lista a colonizar por la nueva especie humana interplanetaria.
Más información en http://www.spacex.com/mars.
Fuente: wwwhat’s new. Fotografías obtenidas del PDF de la presentación compartido por Elon Musk.
