Los jóvenes españoles de 14 a 25 años cada vez se muestran más implicados o dispuestos a implicarse en lo colectivo y son cada vez más conservadores –reivindican valores y virtudes tradicionales como el esfuerzo, el ahorro, la honestidad o la prudencia, por ejemplo- .
Tanto desde el cuestionamiento radical del estado de las cosas –reclamando un cambio de modelo social, político y económico- como desde parámetros más ortodoxos, sin llegar a cuestionar el orden establecido, aunque sí reclamando su perfeccionamiento.
En definitiva, en los últimos años, quizá a causa de la crisis, los jóvenes españoles se han hecho más ortodoxos, más formalmente correctos, más proactivos frente a lo comunitario, más implicados en lo común, y mucho más preocupados por el orden y la seguridad.
Por el contrario, los valores asociados al presentismo o el hedonismo –apurar el momento, primar el ocio, etc- y usados como seña de identidad del estereotipo del joven pasota, del joven ni-ni, parecen haber perdido importancia para los jóvenes españoles.
Éstas son algunas de las principales conclusiones de la investigación “Jóvenes y valores sociales” -realizada por el Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud, un centro privado e independiente creado por la FAD gracias al apoyo de Banco Santander y Telefónica- que ha sido presentada esta mañana en Madrid por Ignacio Calderón y Eusebio Megías, director general y director técnico respectivamente del Centro Reina Sofía sobre Adolescencia y Juventud de la FAD, y por el catedrático emérito de Sociología de la Universidad de Deusto, Javier Elzo, codirector del estudio.
Fuente: FAD.