William Kamkwamba nos enseña el poder del ingenio y la constancia
La historia de William Kamkwamba, el joven genio de Malawi que, a pesar de no tener recursos a su alcance, para ayudar a su familia y pueblo a superar la hambruna que les azotó en 2001, creó un molino de viento con chatarra, con el que consiguió traer agua y generar energía eléctrica para la vivienda en la que vivía con sus hermanas y padres.
William cuenta que durante la hambruna en su casa comían solamente unos bocados de maíz cada noche. Esto también afectó a sus estudios, ya que ni siquiera pudo ir a la escuela por la hambruna, lo que no le impidió acudir a la biblioteca, ya que «estaba determinado a hacer todo lo que pudiera para recibir educación».
A pesar de no conocer bien el idioma inglés, consiguió interpretar libros de ciencia, especialmente de física, con los que aprendió la manera de construir un molino, que luego fabricó con chatarra y con el que pudo bombear agua y generar electricidad. Para su casa, bombear agua significaba riego, una defensa contra la hambruna que pasaban.
William se hizo famoso después de esta hazaña y fue invitado a dar una charla en TED, para él, era la primera vez que cogía un avión o que se alojaba en un hotel; estaba tan nervioso que sólo pudo decir: «Lo intenté y lo conseguí», frase que refleja perfectamente su logro y filosofía de vida:
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=T1XfFVoHJSU[/youtube]
http://www.youtube.com/watch?v=T1XfFVoHJSU
Gracias Montse, por compartirlo con nosotros.
No hay nada más bonito que no rendirse y creer en uno mismo para darse cuenta de que todo puede ser posible!! y lo que más nos suele gustas es regocijarnos en nuestras penas en vez de luchar por lo que queremos. Cuanto nos queda por aprender. ¡Cambiemos ésto y luchemos por nuestros sueños!! 😀