TODO VUELVE.

El Valor de las Pequeñas Acciones.

Mukhtars el día de su cumpleaños sorprendido por la muestra de cariño de los pasajerosPaloma Serén ha compartido en el muro de Cuentamealgobueno en Facebook un vídeo al que merece la pena darle mayor difusión y al que ella misma ha titulado «Todo Vuelve»:

Hay actitudes aportan Bienestar y Esperanza.

Un conductor de autobús de origen somalí llamado Mukhtar, trabaja en Dinamarca. Es su cumpleaños, pero cumple con su ruta como cualquier otro día.

Es querido por todos por su atención, y sobre todo la sonrisa de la que siempre se le ve en los labios. Miren lo que la compañía y los pasajeros han preparado para él…

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=xgOyTNtsWyY[/youtube]

Ver el Vídeo «Mukhtars Fødselsdag – Flash Mob – Bedre Bustur» en Youtube

Este precioso gesto tuvo lugar el diez de mayo de 2010, el cumpleaños de Mukhtar el conductor de Copenhague que desconocía lo que todas esas personas habían planeado para él.

Una forma diferente de viajar en bus…

La acción fue llevada acabo a través de la campaña «Bedre Bustur» (Mejor autobús), que las compañía Danesas de transportes Arriva y Movia llevan a cabo y que consiste en que un par de veces al año preparan un evento «para endulzar el día» tanto a los pasajeros como a los conductores.

El siguiente vídeo es una muestra de otro evento que hicieron en la madrugada del viernes 17 de septiembre de 2010, cuando sorprendieron a los pasajeros con canciones y reparto de bebidas y comidas:

[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=xhmAvL_Mx30[/youtube]

Ver el Vídeo «Natbussen – «Flash» Mob – Bedre Bustur» en Youtube

Los daneses los más felices del mundo.

Fotografía de Copenhaguen por jimg944

Fotografía de Copenhaguen por jimg944

Con estas acciones no es de extrañar que precisamente sean los daneses los más felices del mundo, según el Informe sobre la Felicidad Mundial de la ONU publicado recientemente.

En el artículo publicado el 9 de abril por Ana Martínez, corresponsal en Copenhague de de ABC, se transmite esta sensación que también palpa el visitante de Dinamarca:

Cuando se tiene la oportunidad de permanecer en el país durante un periodo más largo de tiempo, uno se da cuenta de que esa felicidad no es fachada. Las facilidades para combinar vida laboral y familiar ayudan. Y mucho. Quedarse en la oficina más allá de las cinco de la tarde está mal visto (significa que no has sido lo suficientemente productivo como para realizar tu trabajo en el tiempo estipulado); trabajar desde casa cuando los niños están enfermos (o, simplemente, cuando se ha roto la lavadora y hay que esperar al fontanero) es algo habitual; la baja maternal es, después de la de Noruega, la más larga del mundo (entre nueve y doce meses con entre el 80% y el 100% del sueldo) y el Gobierno otorga ayudas de entre 190 y 120 euros al mes por hijo hasta que estos tienen 18 años, que es cuando comienzan a recibir un «sueldo estatal» de 800 euros como estudiantes.

A pesar del frío, el viento y la humedad, Copenhague bulle de vida. Nunca faltan actividades a las que acudir con niños, conciertos con música en directo -Copenhague es la ciudad europea del jazz-, exposiciones que visitar -los domingos todos los museos son gratis- o restaurantes cuyos platos degustar -no en vano, con Noma a la cabeza, Dinamarca lidera la vanguardia de la cocina escandinava-. Y si no, siempre se puede encender unas velas, quedarse en casa, crear un poco de «hygge» (esa palabra danesa, inexistente en otros idiomas, que describe un ambiente agradable) e invitar a unos amigos a beber cerveza elaborada en la «sommerhus» (casa de verano).