Según datos de un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Lund (Suecia) y en función tanto del rendimiento como del esfuerzo empleado, los estudiantes de idiomas consiguen aumentar en mayor medida ciertas regiones cerebrales.

Para llevar a cabo la investigación, se seleccionó por un lado una muestra de estudiantes de la Academia de Traductores de las Fuerzas Armadas de Suecia con facilidad para aprender idiomas, y por otro lado se escogió un grupo de jóvenes dedicados al estudio pero no de idiomas.

El resultado demostró que la estructura del cerebro de los primeros había crecido, mientras que la de aquellos que no se dedicaban al estudio de idiomas permaneció sin cambios. Las partes cerebrales que aumentaron de tamaño fueron el hipocampo (relacionado con el aprendizaje y la orientación espacial) y tres áreas de la corteza cerebral.

Otro estudio sobre el lenguaje y el cerebro realizado en 2010 reveló que en personas bilingües o multilingües la enfermedad de Alzhéimer tiene un desarrollo más tardío. Según los resultados obtenidos, esta enfermedad fue detectada en individuos bilingües cuatro años después que a los monolingües, según publicó la revista Neurology.