Recupera su visión tras treinta años sin poder ver.

Larry Hester, de 66 años, perdió su visión por completo debido a una enfermedad degenerativa, rinitis pigmentosa, que le fue diagnosticada hace tres décadas.

Larry Hester con las gafas especiales conectadas inalámbricamente a su ojo biónico que le permite ver.

Larry Hester con las gafas especiales conectadas inalámbricamente a su ojo biónico que le permite ver.

Sus últimos treinta años han sido para él un mundo a oscuras, literalmente, pero el pasado 1 de octubre, el paciente del Duke Eye Center -de Carolina del Norte, Estados Unidos- recibió un buena noticia: fue el escogido por su cirujano para activar el ojo biónico que le fue implantado tres semanas atrás.

Nervioso, el hombre se sentó a la espera de que activaran el sensor que le devolvería la vista. Su médico comenzó, entonces, la cuenta atrás que culminó con un conmovedor «¡Sí!» de parte de Larry, al ver la luz que tenía en frente.

La mujer de Larry llora de felicidad tras comprobar que su marido puede ver.

La mujer de Larry llora de felicidad tras comprobar que su marido puede ver.

En aquel momento, y tras confirmar que realmente podía ver, su mujer le preguntó «¿puedo besarte?», para después correr emocionada a abrazar y besar a su amado, quien la veía por primera vez, en treinta años.

Por medio de tecnología inalámbrica, el sensor es implantado en el ojo del paciente para permitir captar las señales de luz enviadas desde una cámara montada en unas gafas especiales.

Si bien su médico le informó que el implante no le devolvería la visión normal, si le otorgaría una ayuda visual importante, como distinguir ciertos objetos de otros.

El matrimonio Hester dando gracias por el "milagro" tecnológico y humano que ha permitido que su marido vuelva a ver.

El matrimonio Hester dando gracias por el «milagro» tecnológico y humano que ha permitido que su marido vuelva a ver.

Para su esposa Jerry, el momento más preciado vino mientras miraban juntos un partido de fútbol. Sentada en una silla negra, su piel contrastaba de tal manera que Larry podía ver destellos. En ese momento, él extendió su mano y tocó su cara.«Fue solo un hermoso toque», dijo la mujer al Daily Mail.

Larry se ha convertido en la séptima persona en recibir un implante de ojo biónico. El espectacular momento en el que recuperó su visión fue capturado en el vídeo que mostramos a continuación:

Vídeo: North Carolina’s first retinal prosthesis at Duke Eye Center –

[youtuber youtube=’http://www.youtube.com/watch?v=CiyGOUHD2nI’]

Fuente: 24horas.cl.