Un equipo internacional de científicos, en el que participó la Universidad de Granada, ha descubierto la estructura de gas atómico más extensa hallada hasta la fecha. Asociada a un grupo compacto de galaxias, con una extensión de dos millones de años luz (unas 20 veces el tamaño de la Vía Láctea).

El gas atómico es el material básico a partir del cual se han formado todas las galaxias; cuya evolución consiste sobre todo en acumular gas atómico del medio intergaláctico y después convertirlo en estrellas. Por esta razón, es crucial observar el gas atómico dentro y alrededor de galaxias para estudiar su formación y evolución.

La forma más directa para explorar el gas atómico es a través de la línea espectral de hidrógeno atómico a 21 centímetros en radio. Esta se crea por un cambio en el estado de energía de los átomos de hidrógeno neutro.

Estudio sobre el gas atómico 

El telescopio FAST (Five-hundred-meter Aperture Spherical Telescope), situado en Guizhou (China) y con una antena de 500 metros de diámetro, es actualmente el radiotelescopio de antena única más grande y sensible en el mundo.

Este telescopio ha abierto una ventana nueva al gas atómico en el universo. En particular para el gas difuso, ubicado lejos de las galaxias.

El equipo de investigadores que ha realizado el estudio, publicado en la revista ‘Nature’, llevó a cabo un mapeo profundo. Concretamente, de la línea de 21 centímetros alrededor del grupo compacto ‘Quinteto de Stephan’, un grupo de cinco galaxias situado en la constelación de Pegaso.

Los investigadores han descubierto una muy larga distribución de gas atómico con una extensión de dos millones de años luz. Lo que supone la estructura más grande de gas atómico encontrado hasta ahora alrededor de un grupo compacto de galaxias.

Observaciones

Las observaciones realizadas para esta investigación a través del telescopio FAST han conseguido la mayor sensibilidad lograda hasta la fecha del hidrógeno atómico. “En numerosas ocasiones desde su descubrimiento por el astrónomo francés Edouard Stephan en 1877, el Quinteto de Stephan nos ha dado sorpresas sobre la compleja interacción entre las galaxias en el grupo, y también sobre la relación de las galaxias con el medio intragrupal”, explica Ute Lisenfeld. del departamento de Física Teórica y del Cosmos de la Universidad de Granada.

Las nuevas observaciones demuestran que existe un gas difuso con una baja densidad y con una gran extensión. Con mucha probabilidad, esta estructura de gas lleva ahí desde aproximadamente 1.000 millones de años.

“Las observaciones son un desafío para nuestra teoría actual de la formación y evolución de grupos de galaxias porque no está claro cómo un gas atómico con tan baja densidad puede sobrevivir la ionización del fondo intergaláctica de radiación ultravioleta durante tanto tiempo”, concluye Lisenfeld.

Fuente: Agencia Servimedia 

CAB/AR