Investigadores desarrollan un nuevo sistema con membranas y electricidad para analizar compuestos contaminantes en aguas.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Sevilla ha desarrollado un nuevo sistema que combina membranas y electricidad para analizar compuestos contaminantes en aguas.
Estos compuestos contaminantes, llamados parabenos, están muy distribuidos por el entorno ya que forman parte de la composición de muchos productos cosméticos y farmacéuticos. Por este motivo, “su presencia como contaminantes emergentes condujo a que se regularan sus concentraciones máximas en productos cosméticos y de higiene”, explica Miguel Ángel Bello López, investigador del Departamento de Química Analítica de la Universidad de Sevilla.
Asimismo, en los distintos ensayos de este estudio, llevados a cabo en el río Guadalquivir y en pantanos sevillanos: “aunque no existe aún una normativa que establezca los niveles máximos en aguas, las cantidades encontradas son mínimas y acordes con otros estudios internacionales”, apunta el investigador.
La técnica desarrollada consiste en una fibra hueca y porosa de prolipropileno que se recubre con una membrana líquida de un disolvente orgánico. Este disolvente hace posible la extracción selectiva de los parabenos y permite el paso de la corriente eléctrica. La fibra se sumerge en el líquido que se pretende analizar y se genera un campo eléctrico para atraer las cargas negativas de los parabenos que se introducen dentro de la fibra hueca.
Según los expertos, esta nueva técnica es un procedimiento sensible, barato y sostenible con el medio ambiente debido a la baja cantidad de disolvente que requiere:
“El sistema resulta muy sostenible y se enmarca dentro de la denominada ‘Química Verde’, por el bajo coste de los materiales empleados, así como por los niveles de reactivos utilizados. Gastamos del orden de mil veces menos de disolvente orgánico que en otros procedimientos”.
Hemos conocido esta interesante noticia a través de la agencia Sinc.