Proyecto Jóvenes para Jóvenes
Profesores de la UMA, profesionales, estudiantes y miembros de ONG’s abordan en La Noria temas como la inmigración, el acoso escolar, igualdad de género o los derechos de la infancia
La Fundación Harena y la ONG Helsinki España organizan desde el viernes 12 y hasta el sábado 20 de enero una nueva edición del proyecto ‘Jóvenes para Jóvenes’ (JPJ), que llevará los Derechos Humanos (DDHH) a los centros escolares a través de jóvenes estudiantes de la Universidad de Málaga.
Una veintena de estos estudiantes participa en las instalaciones de La Noria de un programa gratuito de 35 horas de formación en materias como la inmigración y los refugiados, los derechos de la infancia, el acoso escolar y las redes sociales, la igualdad de género o el acceso a una vivienda digna.
Además, los jóvenes asistentes a estas jornadas de formación aprenderán técnicas de negociación colaborativa para la resolución de conflictos, y profundizar en las bases que fundamentan los Derechos Humanos.
La iniciativa cuenta con el respaldo económico del Ayuntamiento de Málaga, y con la participación de profesionales, profesores de la Universidad de Málaga (UMA) y personal de diferentes ONG. La formación que se imparte se complementa con dinámicas de grupo y talleres, y está acreditada por el Parlamento Europeo.
Acerca del proyecto Jóvenes para Jóvenes
Esta iniciativa nació en Madrid de la mano de Helsinki España, y posteriormente comenzó a extenderse por Castilla y León, Castilla-La Mancha y País Vasco hasta llegar a Málaga gracias a la Fundación Harena.
El programa surgió tras constatarse que en las universidades y colegios existía una creciente falta de sensibilización y concienciación en materia de Derechos Humanos y erradicación de la pobreza.
Universitarios como corresponsables de derechos humanos
La peculiaridad del proyecto radica en la revalorización de los jóvenes universitarios como agentes educativos, activos y críticos generadores de cambios entre sus iguales: estos universitarios se hacen corresponsables de la realidad en la que viven, acompañando en esta misma práctica a otros alumnos de menor edad.
Formando a estos jóvenes para que ellos acudan posteriormente a formar a otros adolescentes en diferentes colegios se crean nuevos modelos de desarrollo y ciudadanía responsable.
El proyecto se aborda, además, desde una perspectiva integral, ya que el profesorado y la familia de los menores también forman parte de esta comunidad de aprendizaje.