El trabajo conjunto entre varios organismos ha acabado con un punto negro de electrocución de aves considerado como el más letal de la provincia de Jaén. Concretamente, el proyecto lo ha impulsado Aquila a-LIFE y la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía. Junto a la colaboración de un propietario privado.

De este modo, se han podido corregir medio centenar de apoyos (postes) de un tendido eléctrico de propiedad particular. El cuál discurre por los términos municipales de Linares y Bailén. Y es que más de 50 aves, la mayoría rapaces, han muerto electrocutadas en este tendido en los últimos años, según informó Grefa.

Protegiendo al águila Bonelli

Desde su puesta en marcha hace más de tres años, Aquila a-LIFE ha hecho posible que se corrijan más de 3.200 apoyos eléctricos que eran peligrosos para el águila de Bonelli. Una especie cuya recuperación es el objetivo de este proyecto apoyado por la UE.

En la mayoría de estos apoyos se ha intervenido por indicación de este proyecto con fondos de varias compañías eléctricas. Aunque más de 200 de esos apoyos han sido financiados parcial o totalmente por Aquila a-LIFE, que se ha centrado en ayudar a propietarios particulares de tendidos eléctricos con menos recursos que las grandes empresas del sector.

El tendido eléctrico corregido, concretamente en la finca ‘Las Yeguas’, es el primero de propiedad particular que se beneficia de estos fondos en Andalucía. «Durante estos años atrás, más de una veintena de rapaces, entre ellas seis águilas de Bonelli, se han electrocutado en este tendido. Que con el arreglo que hemos efectuado dejará de causar más muertes de aves«. Así lo indicó Ernesto Álvarez, presidente de Grfa, entidad que se ha encargado de ejecutar esa corrección.

Evitar la electrocución de aves

Además de en Andalucía, Aquila a-LIFE ha actuado para corregir tendidos eléctricos en la Comunidad de Madrid y otras áreas del centro peninsular, en Navarra, Álava, Mallorca y Cerdeña. El proyecto interviene tanto en zonas donde se han reintroducido águilas de Bonelli o bien está previsto liberarlas como en áreas donde estas aves se dispersan cuando son jóvenes o se asientan al llegar a la edad reproductora y emparejarse.

La electrocución es la principal causa de mortalidad de muchas especies de rapaces, incluida el águila de Bonelli. Según datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, más de 33.000 de estas aves mueren anualmente en el territorio español debido a electrocuciones o colisiones en tendidos eléctricos. De más de 300 águilas de Bonelli dotadas con emisores GPS que han sido seguidas desde hace 10 años, casi un 25% murieron electrocutadas.

Fuente: Agencia Servimedia

CAB/AR